jueves, 26 de junio de 2014

LA IZQUIERDA ABERTZALE NO CAMBIA

Con la llegada de BILDU a las instituciones algunos pensaron que la izquierda abertzale iba a abandonar, aunque fuera de forma paulatina, una forma de actuar fraguada a lo largo de su existencia y cuyo fundamento último era el insulto, la provocación y la mentira; el matonismo político en una palabra.

No ha sido así. La política de la izquierda abertzale es bien sencilla, y consiste la mayor parte de las veces en inventarse un eslogan y repetirlo hasta la sociedad, mintiendo todo lo necesario para que el eslogan parezca tener sentido aunque sea una soberana estupidez.

Ejemplos tenemos todos los días. El último, el de la privatización de Kutxabank. Diciendo miles de veces que el PNV quiere vender Kutxabank es posible que haya quien acabe creyéndolo, pero no deja de ser una gran mentira, y lo peor es que quienes la repiten cientos de veces todos los días lo saben.


La pretensión del Partido Nacionalista Vasco no es otra que garantizar la pervivencia y el control público de Kutxabank, buscando además la continuidad de la obra social y que la entidad bancaria sea un instrumento para el desarrollo económico de Euskadi. para lograrlo es necesario cumplir la legislación, aunque no nos guste. La izquierda abertzale lo sabe, pero prefiere seguir mintiendo e injuriando, llevan muchas décadas haciéndolo.


Por eso carteles y montajes como  el que se reproduce aquí solo demuestran la incapacidad de la izquierda abertzale para el debate; de lo que si son muy capaces es de recurrir a la mentira y al "montaje", eso está mas que acreditado.